Si alguien no conoce la teoría de la Doctrina del Shock de Naomi Klein le recomiendo con premura que se acerque a la luz de sus postulados. Tiene dos opciones, leer el citado libro o ver el documental que colgaré en este post sobre esta teoría y las explicaciones de su autora en distintas conferencias. En este blog critico, de vez en cuando, los principios de la escuela económica de Chicago, creadora del Neoliberalismo, con Von Hayek entre uno de sus teóricos principales crítico del socialismo económico y su planificación y defensor de la no intervención del estado en la economía. De acuerdo o en contra es respetable toda posición, pero sin duda lo que es inadmisible es, cómo se cuenta en el libro y su documental, que la escuela de Chicago ensayara sus postulados económicos de desmantelamiento del Estado del Bienestar utilizando el shock que produce el miedo para que la población adoptara sumisamente las medidas de erradicación derechos básicos. Chile a través de la dictadura de Pinochet, Argentina con Videla y Thatcher con la guerra de las Malvinas y su continuo desmantelamiento del estado del bienestar, uno de los más avanzados de Europa en su tiempo (como ha mostrado Tony Judt en varias ocasiones, al igual que Bauman) son más que repudiables. Utilizar el miedo, la confusión, el temor para que la población acepte cualquier medida aunque ello represente pasos atrás en sus conquistas sociales no es solo despreciable, sino que carece de toda sensibilidad o empatía humana. Utilizar la manipulación del miedo, aterrorizar y acudir a los instintos más básicos de supervivencia es cuanto menos espeluznante y un acto más de terrorismo contra la población refiriendonos a la definición básica del concepto anterior, utilizar el terror para conseguir objetivos pretendidos.
Es de todo punto curioso o llamativo que se esté utilizando a la selección española y sus partidos, da igual que gane o pierda, pues el shock emotivo o sentimental de la victoria o derrota distrae la atención de decisiones que se están tomando o llevando a cabo que suponen gigantescos pasos atrás en nuestros derechos básicos de ciudadanía. Como decía, es curiosa la coincidencia de que durante el partido de ayer se diera a conocer el medicamentazo o se hiciera efectiva la nacionalización de Bankia con la consiguiente repercusión que tendrá dicha medida en nuestro erario público y la obligada aportación de los contribuyentes. Naomi Klein puede comenzar a estudiar la variante de la teoría del Shock en España...quizás la bautice con la Doctrina Selección...
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