Acabo de terminar una de las mejores biografías que he leído. Quien se adentre en las páginas de la biografía novelada de Juan Belmonte gracias a uno de los mejores periodistas de nuestro país, Chaves Nogales, encontrará la historia de una persona hecha entre agravios y dificultades, soportando las cornadas del hambre, la soledad... las precariedades de una vida falta de un camino cierto y llevada en volandas entre las pasiones de un ser amante del toreo en el campo. Una historia picaresca cuyas anécdotas hacen pasar un buen rato, pero salpimentada con reflexiones sobre la vida y la sociedad de su tiempo que hacen que tome altura y no quede en un mero anecdotario. Descubrir la vida dura y dificil de la Andalucía de principios de siglo XX a través de los ojos de Belmonte y los anteojos de Chaves Nogales es todo un placer, en serio, hacía mucho tiempo que no disfrutaba tanto con un buen libro. No lo duden, cómprenlo y devórenlo.
«Yo canto al varón pleno,
al triunfador del mundo y de sí mismo
que al borde –un día y otro- del abismo
supo asomarse impávido y sereno.»
al triunfador del mundo y de sí mismo
que al borde –un día y otro- del abismo
supo asomarse impávido y sereno.»
(Oda a Belmonte, Gerardo Diego)
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