Rajoy simplón.

Supongo que a toda aquella persona que le guste la lectura, la oratoria, la política, repararía en Rajoy como uno de los políticos del PP que mejor habilidad parlamentaria tenía. No manejaba mal la ironía y sus declaraciones parlamentarias en el Congreso durante el gobierno Aznar lo hicieron merecedor de esas características: ministro con dotes para la oratoria y la ironía. Lo que me sorprende es cómo una persona que era conocida y reconocida por sus habilidades para con la dialéctica haya caído en el más absoluto simplismo a la hora de hacer declaraciones. Parece haberle poseído cierto espíritu simplón que ha ido deteriorando su habilidad para dar a entender lo contrario de lo que se dice. A mi entender todo comenzó con el desastre del Prestige, creo que la primera declaración de Rajoy que a todos nos sorprendió fue aquella de "no son más que unos hilillos de plastilina". Entre sus primos se encontraba un científico...al que le habrá hecho un verdadero favor...cuando afirmó lo de "tengo un primo que dice esto del calentamiento global son tonterías porque nadie puede predecir lo que pasará en 300 años". Innumerables declaraciones de este tipo. El culmen fue el debate con Rubalcaba cuando afirmaba "El objetivo en España es el crecimiento económico y el empleo. El empleo es capital, vida para la gente, permite llevar un proyecto de vida, le permite ser útil y para que haya empleo debe haber inversión. Esto lo entiende todo el mundo y para que haya inversión debe haber confianza, porque nadie invierte si no ve que no puede obtener un beneficio o que el negocio le vaya bien. Además de confianza debe de haber crédito. ¿Qué creo yo que es necesario para que haya confianza en España? Primero un cambio político. Es un requisito necesario no suficiente porque si seguimos con ustedes y con sus políticas pues ya me dirá en dónde podemos terminar. En segundo lugar es muy importante un gobierno competente. Es decir con ministros que sepan de lo que hablan, que se conozcan bien los temas y que se los estudien. En tercer lugar decir la verdad y hacer un buen diagnóstico..."y no sigo más porque es un ejercicio de palabras huecas, vacías y simplonas sobre qué hacer en política. La frase que ha dado motivo a este post en el blog ha sido la última declaración de Rajoy en Chicago que escuché el domingo en RTVE "A los españoles lo que nos tiene que preocupar es hacer bien las cosas". Humildemente creo que este tipo de declaraciones enardecen mucho más a los españoles porque la respuesta inmediata es ¿qué estamos haciendo mal? lo estará haciendo usted...

Ayer en Málaga el Presidente Griñán centraba con acierto su discurso en el diagnóstico que siempre mantuvo sobre el origen financiero de la crisis, y no el del déficit público, que siempre se ha utilizado para desmantelar el estado del bienestar. Aportaba una interesante lógica del pensamiento neoliberal del PP al no asumir responsabilidades y denunciaba los injustos recortes a los que está sometiendo el gobierno del PP a Andalucía. "Primero fue la herencia recibida, cuando se hunde el sector financiero, la culpa es del Banco de España, cuando hay déficit, la culpa es de las Comunidades Autónomas" "El esfuerzo que se pide a Andalucía es profundamente injusto; si tenemos menos del 14% del déficit y un endeudamiento histórico que es la mitad de las demás comunidades, no es justo que se nos pida un ajuste del 21% del total."